Mientras la Policía Estatal, Federal (ahora Guardia Nacional) y el Ejercito Mexicano sigan reculando ante la delincuencia por colusión o temor, nuestra policía municipal seguirá poniendo los muertos; y lamento decirles que ya van 5 en el ultimo año.

Históricamente San Luis Río Colorado se ha caracterizado por tener a la policía municipal más entrona de todo Sonora, con todo y sus bajos sueldos y la deficiente capacidad armamentista. En verdad los hombre y mujeres de azul que tenemos se han rifado el pellejo, digan lo que digan.

Ya sea el “atorón” de un comando armado, aseguramientos de droga, detención de chiquinarcos y narcos de verdad, la policía municipal ha sido el primero en la linea de fuego.

Y ciertamente, la policía municipal tiene el estado de fuerza mas numeroso del resto de las corporaciones en San Luis, lo que ha orillado a la mayoría de los elementos asumir tareas que no le corresponden, pero las ejecutan por el bien de los sanlusinos.

Los policías municipales actúan no solo por el deber ser, sino porque el resto de las corporaciones hacen como que hacen, pero la verdad es que no hacen nada. Es una verdad.

La muerte de dos policías municipales duele como han dolido con los últimos tres. Duele porque eran amigos, porque eran padres de familia, hijos y por encima de todo, eran sanluisinos con un genuino espíritu de servicio.

El llamado es claro, ya es tiempo que el resto de las corporaciones hagan su trabajo, asuman su responsabilidad en la tarea de garantizar la tranquilidad de todos, de lo contrario, nos seguiremos sintiendo intranquilos y seguiremos poniendo los muertos.